Magazine SLV. Artículo de opinión de Julio Gómez
El Madrid perdió contra el Milán dando la sensación de ser un equipo mal trabajado y sin ideas claras. Como con el Barça hace unos días. Ese es el presente de un equipo que vive actualmente solo de las genialidades de sus estrellas. Si eso no aparece no hay nada más. Ni pizarra ni segundas jugadas. Parece mentira que el Rey de Europa esté en esta situación. Ancelotti debe mover el árbol o se le va a caer encima. O lo que es lo mismo, le pueden despedir incluso antes de que termine la temporada. Triste, pero cierto. El italiano tiene un fondo de armario con nombres llenos de juventud y hambre como para demostrar que pueden ser estrellas. No pueden quedarse en el banquillo eternamente. Está bien ver a los titulares en los grandes partidos, pero si no funciona hay que probar cosas. El buenismo del italiano para no cabrear a los capos del vestuario no está dando frutos. Esta temporada no. Tiene que aparecer el látigo, dentro de la psicología de este entrenador veterano de guerra.
Arda Güler y Endrick son los hombres. Es inaceptable que jueguen a partir del minuto 80. Anoche ni un solo minuto. Su magia para inventar en la segunda parte es fundamental para recomponer a un equipo dubitativo. E incluso la titularidad en partidos con rivales menores tendría que ser obligatoria. Otros jugadores meritorios son Rodrygo y Camavinga. Ambos tienen vitola de desgastar contrarios. Mucho más que Modric o Tchouaméni. Lo de este francés ya roza el insulto. No roba ni defiende. ¿De verdad es un jugador para el Madrid? Cada partido deja claro que no. Su propia afición ya le ha sentenciado.
Más allá de nombres, en lo táctico la presión adelantada es un arma a mejorar. Los delanteros tienen que iniciar esa tarea. Ahí entran Mbappé y Vini que actúan como mirones sin balón. Los blancos no se pueden permitir esa actitud cuando no salen las cosas. Y ya si Ancelotti se pusiera serio para decidir donde juega cada uno sería fantástico. Es grotesco ver como ambos ocupan la misma posición en el campo. No es tan difícil. Vini por la izquierda y Mbappé por el centro. Les guste o no es la mejor opción para el colectivo. En ese esquema hipotético de 4-3-3 debería entrar Rodrygo como extremo derecho.
El Madrid está a tiempo de volver a conseguir una temporada para el recuerdo positivo. Tan solo se trata de mover el árbol urgentemente. Ancelotti, si no lo haces te van a fagocitar desde el palco más pronto que tarde. No se lo pongas fácil a aquellos que te tienen ganas. Los pitidos de la afición son el primer paso. Zidane ya calienta por la banda y se está quitando el peto. A ver si va a resultar que el verdadero entrenador del Madrid era Toni Kroos. En ese caso, dale unas clases a Carletto, Don Antonio.
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